Roma, una mirada introspectiva a la cultura mexicana

Roma es una película contada en blanco y negro. Cuando el director apostó por grabar en este formato era consciente de que se la jugaba, que la apuesta podía acabar mal. Pero le salió redonda y, después de disfrutar de sus más de dos horas de metraje, el espectador tiene la impresión de que el filme no hubiera tenido la misma eficacia narradora de haberla rodado en color.
Alfonso Cuarón quería volver a su infancia, al tiempo en que las cosas parecían recién hechas y todo tenía aire a mundo recién descubierto.
A través de la visión de un cámara que asiste como testigo de la historia, no con actitud de un ojo fisgón y censurador, sino con la mirada aséptica del testigo neutral que se limita a dar cuenta de lo que sucede sin juicios ni condenas, Roma nos lleva por las calles de la ciudad de México para enseñar el pálpito en el corazón en las calles y de la vida dentro de los muros de las casas: el ruido del agua al fregar los patios, las risas y los gritos de la chiquillería, el pregón de los vendedores de lotería, el trasiego de la gente a la salida del cine, el bullicio de las multitudes yendo de un lugar a otro, una banda militar tocando un himno desangelado, el tráfico de la ciudad donde abundan carros norteamericanos enormes que no caben en ninguna parte.
El realizador va escribiendo la historia a través de la lente de una cámara, casi siempre en plano lateral y a media distancia, como si no quisiera entrometerse entre los personajes y los conflictos que viven.
En el centro del foco siempre está Cleo, la sirvienta que, de la mañana a la noche, siempre está trajinando de acá para allá, sirviendo comidas y curando heridas, acompañando a los niños al colegio o al cine, haciéndoles reír y dándoles el cariño que no reciben de un padre ausente y de una madre esquiva.

Su director, Alfonso Cuarón, ganó el Óscar en 2013

 

Nacido en Ciudad de México el 28 de noviembre de 1961, Alfonso Cuarón Orozco se convirtió en el primer cineasta latinoamericano en obtener el Óscar al mejor director cuando en la edición de 2013 obtuvo la estatuilla por su trabajo en la cinta Gravity.
Su reconocimiento internacional le llegó tras dirigir filmes como La princesita, Su mamá también, Harry Potter y el prisionero de Azkaban e Hijos de los hombres.
Sin embargo, su incursión en la ficción televisiva no ha tenido el mismo éxito. Tras ganar el Óscar por su trabajo en Gravity, Alfonso Cuarón decidió probar suerte haciéndose cargo del rodaje de la serie Believe, pero ni la crítica ni el público la acompañaron y la ficción fue cancelada tras solo estar una temporada en antena.
¿De qué trata, exactamente, Roma?
La cinta narra un año en la vida de dos mujeres: Cleo, protagonizada por Yalitza Aparicio, y Adela (Nancy García). Ambas son trabajadoras domésticas de origen indígena mixteco que realizan trabajos para una familia bien posicionada en un barrio de clase media en la Ciudad de México.
La acción transcurre en los turbulentos años setenta mexicanos y es un retrato de la sociedad de ese país en aquellos años de agitación política.
Mucho se ha hablado del rastro biográfico que hay de su director en la película, y de la vida y de la infancia de Cuarón en la colonia Roma de la capital azteca.
Roma es el lugar de su memoria donde Cuarón regresa para retratar con amor a las mujeres que le criaron y al tiempo en que vivió. Cleo es la proyección de la nana de carne y hueso que, durante la infancia del cineasta, le cuidó hasta convertirse en su segunda madre.
Mientras cuidan de los hijos de la familia para la que trabajan, las dos sirvientas, Cleo y Adela, se convierten en testigos mudos de un matrimonio que hace aguas y de un padre médico que siempre está de viaje y que engaña a su mujer.
En su tiempo libre, las dos empleadas domésticas salen con sus novios hasta Cleo le comunica a Fermín, su pareja, que está embarazada.
Conflicto político e historias de personajes cotidianos, viajan en direcciones paralelas hasta que se cruzan en Roma condicionando las vidas de las personas y marcando sus destinos.
La trama discurre en dos planos: la vida en la casa contada a través de la mirada de Cleo, y el conflicto político que vive México. El uno parece ajeno al otro, hasta que, finalmente, se encuentran, en el mismo momento en que Cleo vive el peor día de su vida y las revueltas estudiantiles tienen un desenlace sangriento.
Roma es una película merecedora del elogio y de los premios, ensamblada con la mano maestra de un director que cuenta una historia sin alardes, con sobriedad, pero sabiendo sacar lo mejor de la historia y lo más característico de los personajes.

Lugares icónicos de CDMX que aparecen en la cinta

 

La película de Alfonso Cuarón es un retrato preciso de la ciudad en la que vivió. Algunos de estos escenarios naturales son:
La casa donde viven y trabaja Cleo existe en la calle Tepeji de Roma Sur. La fachada sigue intacta, pero se cree que su interior fue demolido.
La esquina donde Cleo y Adela casi resultan atropelladas cuando corrían hacia el cine está emplazada en la colonia Tabacalera, entre las calles Ignacio Mariscal y José María Iglesias.
El México conflictivo de los años 70 está rodado en la colonia Narvarte.
El cine al que acuden las sirvientas con sus novios es el Teatro Metropólitan, en el centro de CDMX.
La torta de pavo que comen Cleo y Adela lo hacen en el restaurante La Casa del Pavo, que aún permanece abierto en Motolinia 40.
En la Ribera de San Cosme, a la altura del Metro Normal, fue donde el equipo de Cuarón grabó la escena del Halconazo, durante la represión estudiantil.
El Hospital al que acuden Cleo y Sofía fue el centro médico donde trabajaba el padre del director de Roma.
También aparece en la película la escuela donde Cleo lleva todos los días a los niños a clase. El edificio está situado en Tlaxcala 105, en la Roma Sur, y se utiliza ahora como bazar.
Durante las revueltas estudiantiles, Cleo, la abuela y el chófer presencian los momentos más violentos del Halconazo, y lo hacen situadas en un edificio ubicado frente al Metro Normal. El sitio se trata del gimnasio que está justo enfrente de la estación.
Hay otros lugares en los que se ambienta Roma que existieron o aún existen en CDMX, como el sitio donde entrena Fermín, cerca del Cerro de Chimalhuache, la calle en que estacionan el vehículo para subir a la mueblería o la esquina del Cine de Las Américas.

 

¿Puede ganar “Roma” el Óscar a mejor película?

 

 

Si Roma se alzase, finalmente, con el galardón al Óscar a la mejor película, sería la primera vez que una producción financiada por el gigante del streaming Netflix se llevase el premio gordo cinematográfico.
Por lo pronto, que le quiten lo bailao: Roma ya está nominada a los Globos de Oro y a los Goya a la Mejor Película Iberoamericana, y ganó el León de Oro en el Festival Internacional de Cine de Venecia.
La cinta ha sido saludada efusivamente por los críticos de Nueva York que la consideran la mejor película del año.

De entre los logros de la película, los críticos destacan la interpretación de Yalitza Aparicio y a la que señalan como una de las grandes actrices del momento.
Sin embargo, Yalitza se dedicaba a la enseñanza como profesora de preescolar hasta su trabajo en la película. Cuando se presentó para el casting que debía elegir el reparto, la actriz que interpreta a Cleo le asaltó el temor a que la selección del plantel artístico era una simple tapadera que ocultaba una red de trata de personas.

Estrenada en unas pocas salas de cine, Netflix decidió emitirla en su plataforma a los pocos días de ser visionada por los escasos aficionados que lograron adquirir una entrada en el poco tiempo que estuvo en cartelera.
Para los entendidos, Roma es cine puro y hermoso, todo suena a verdad auténtica, que a cierta tanto a la hora de mostrar un retrato preciso de la sociedad revuelta que le tocó vivir al cineasta en su juventud, como en la exposición de la vida sencilla de las sirvientas que le ayudaron a crecer supliendo las carencias familiares.